“Ustedes los veganos se creen superiores, son muy soberbios”.

Prácticamente todo vegano recibió esta acusación en algún momento. ¿Será entonces que realmente nos creemos superiores? La realidad es todo lo contrario.

Los mismos que nos acusan son quienes dicen que los humanos somos superiores a los demás animales[1], que éstos fueron puestos por Dios en la tierra para que podamos usarlos, que somos la cúspide de la pirámide alimenticia y que tenemos una inteligencia superior que nos permite usar y abusar de los animales (y el planeta tierra) a nuestro antojo.

¿Acaso no es eso sentirse superior?

O dicho de otra manera, si los veganos nos creemos superiores, ¿cómo definimos esa actitud?

¿Híper superioridad? ¿Superiores al cuadrado?

Los veganos aceptamos que tenemos diferencias con los demás animales y que tenemos un cerebro más desarrollado, pero no creemos que eso nos dé permiso para esclavizarlos, explotarlos y asesinarlos para satisfacer nuestros deseos. Por el contrario, respetamos el derecho de vivir de los demás animales y no los vemos como mercancía.

Si una inteligencia superior justifica el abuso, ¿qué hacemos con los seres humanos que nacieron con retrasos mentales? ¿Los explotamos? Normalmente eso no sucede en nuestra sociedad. Y no creo que quienes decidan respetar a estas personas y no abusar suyo se crean superiores a violadores, por ejemplo. Simplemente están haciendo lo que consideran éticamente correcto. De igual manera como comunidad vegana decidimos respetar a los demás animales, y sabemos que eso no nos hace superiores.

Entonces, ¿quién tiene soberbia?

Respecto a la soberbia, nuevamente creo que es una acusación incorrecta. De hecho, nada más lejos que la realidad, porque el primer paso para hacerse vegano es tener la humildad suficiente para reconocer que se está cometiendo un error. Para convertirme en vegano tuve que admitir que lo hecho en los primeros 25 años de mi vida fue incorrecto. Dudo que una persona soberbia admita algo así. (Leer «Veganismo y lavado de cerebro»)

Luego, el segundo paso es pasar a la acción y cambiar la postura ética de vida. Y justamente son las personas soberbias las que no están abiertas al cambio: “siempre he comido así”, “llevamos miles de años comiendo carne”, “no puedo dejar la carne” o “es parte de nuestra cultura”.

En definitiva, para cambiar de “carnívoro”[2] a vegano, hay que mirarse al espejo con la suficiente humildad para admitir que estamos participando de una masacre de seres inocentes, y además tenemos que entender que nuestro apetito no es más importante que la vida de una vaca, pollo o cerdo, entre otros; sintiendo que no somos superiores a ellos.

 

Felipe Cabrera

[1] Se usa “animales” para referirse a animales no-humanos
[2] Se coloca entre comillas, porque biológicamente los seres humanos somos una especie animal que no puede ser considerada carnívora: los comportamos como omnívoros pero tenemos una constitución frugívora [herbívora]. Fuente: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC1312295/